Coincidiendo con la buena noticia de la restauración del Alminar de San Juan, vamos a hacer una visita por los alminares de los que aun quedan restos en la ciudad. Salvo la omnipresente Mezquita, apenas quedan construcciones de la gran Córdoba islámica, es por esto que estos restos aprovechados para los nuevos templos cristianos, y poco conocidos, tiene un interés evidente.

ALMINAR DE SAN JUÁN

El alminar de San Juan es una torre perteneciente a una antigua mezquita de la época califal, situada en la plaza de San Juan. Tras la conquista de la ciudad por parte de las tropas castellanas en 1236, fue cedida a los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén, también conocida como San Juan de los Caballeros, nombre que da a la iglesia de San Juan de los Caballeros.

Descubierto como alminar en 1927 durante las obras de reforma de la iglesia, es restaurado por Félix Hernández. De estilo califal, presenta una planta cuadrada de 3,70 m de lado, un solo cuerpo de sillares dispuestos a soga y tizón con arcos gemelos de herradura sobre columnillas de mármol con fustes visigodos. Remataba este primer cuerpo una hilera de arquillo califales ciegos, los cuales no son apreciables salvo por las tres columnillas que aún son visibles. La torre tuvo un segundo cuerpo que fue desmontado y sustituido por la cubierta a cuatro vertientes que tiene actualmente. Su altura original debió de ser algo superior a la que en la actualidad posee, rematado por un desafortunado tejado a cuatro aguas. En su lugar, la torre culminaba en linterna sobre terraza almenada. Dos almenas escalonadas fueron halladas en la excavación efectuada, lo que parece corroborar esta hipótesis. En su interior oculta una escalera de planta circular, con machón central, realizada en fecha cercana a la construcción del muro exterior del alminar, aunque con posteriores retoques efectuados entre los siglos XIII y XV.

El alminar de San Juan es, tras la mezquita, el mejor exponente de arte califal conservado en la ciudad.

TORRE DE LA MEZQUITA

La principal de todas es la de la Catedral, cuyos 54 metros la convierten en la construcción más alta de la ciudad, altura salvada interiormente por sus 203 escalones. En su interior encierra, “como una almendra dentro de su cáscara”, el alminar árabe construido por el califa Abd al-Rahman III. Solo si se sube a la torre campanario, se pueden ver algunos elementos pertenecientes al antiguo alminar.

Esta constatado que los tres grandes minaretes almohades, entre los que se encuentra la Giralda, están hechos según el modelo de Córdoba. Ver estos minaretes es una buena manera de hacernos una idea de cómo era el de Córdoba originalmente y antes de la reforma de Hernán Ruíz.

Los almohades fueron grandes constructores de alminares. Utilizaron este elemento de la mezquita, símbolo por excelencia de la presencia y el triunfo del Islam, no sólo con objetivos puramente religiosos sino también como signo de legitimación y de propaganda e incluso con fines estratégicos. El alminar de la mezquita aljama de Córdoba les sirvió de modelo, lo que, a su vez, les permitía presentarse a sí mismos como herederos del califato omeya de Occidente. Los alminares de sus grandes aljamas, la Kutubiyya de Marraquech, la Giralda de Sevilla y o la de ˘asan en Rabat, manifiestan esos propósitos.

En la foto se puede ver un antiguo dibujo de un libro del Coro, en el que se aprecia el aspecto del primer campanario que se construyó sobre el alminar, antes de la reforma integral de Hernán Ruíz.

ALMINAR DE SAN LORENZO

Está construida sobre la mezquita de Al-Muguira, creada en época califal (siglo X) El sólido alminar árabe fue convertido por Hernán Ruiz el Joven en torre renacentista y se considera precedente de la Giralda de Sevilla. Ahora, la base del mismo se puede contemplar en el interior y exterior de la iglesia.

En la última restauración, ya en el siglo XXI se decubrió una ventana califal, de la que destaca el hallazgo de una columna con su capitel de época omeya. La columna presenta todos sus elementos intactos, tales como el cimacio, capitel, fuste y basa. El capitel es califal de avispero, del siglo X.

En las fotografías se puede ver, a la izquierda la base que pertenece al alminar y sobre la que se construye la torre renacentista con una cuadratura distinta. En el centro la ventana califal recientemente descubierta, y a la derecha la puerta, hoy cegada de acceso al alminar.

ALMINAR DEL CONVENTO DE SANTA CLARA

Santa Clara es un convento situado en la calle Rey Heredia, declarado Bien de Interés Cultural. Fue el primer monasterio femenino de Córdoba tras la conquista cristiana, ya que se instituyó en el año 1256, entonces con apenas ocho monjas clarisas. Fue construido sobre una mezquita del siglo X de la que aún conserva el alminar.

Fue el primer convento fundado en la ciudad de Córdoba tras la conquista cristiana, en octubre de 1265, con sólo ocho monjas. Fue construido sobre una antigua mezquita califal (976) que, a su vez, había sido construida sobre la basílica de Santa Catalina, del siglo VI. Aún conserva reminiscencias, tales como el alminar convertido en campanario y el arco de herradura cegado que se aprecia en la calle Osio.

El alminar, a diferencia de otras iglesias, como la de San Lorenzo, no sufrió modificación alguna, aunque se desmontó el cuerpo superior. Hasta finales de los años 1990 se apreciaban aún coronando el que fuera primer cuerpo del alminar las almenas escalonadas, similares a las que se ven en el muro exterior de la mezquita.

El convento se ubicó, inicialmente, en la parte de la mezquita, transformándose más tarde en iglesia, y adaptando el patio a la estructura del claustro.

ALMINAR DE SANTIAGO

La torre de la Iglesia de Santiago de la Ajerquía conserva parte de su fábrica islámica rematada por una espadaña que la hace pasar por construcción cristiana. Posee en su base escasos restos de paramento con traza califal. Su construcción se data entre los dos últimos tercios del siglo IX. Es, por tanto, el más antiguo de los alminares andalusíes fechados hasta el presente. También es el que está más próximo a nuestro Hotel Viento10.

Su fábrica islámica se desarrolla en los dos cuerpos de que consta la torre, que suman 8,80 metros de altura. El cuerpo inferior es de planta cuadrada, con paramento liso de grandes sillares trabados con mezcla. El superior, igualmente de planta cuadrada, tiene una altura de algo más de dos metros y medio y carece del remate con característico reborde de almenas que lo circundaban. En la mitad superior de su lienzo meridional que da al interior del templo cristiano destaca una interesante ventana geminada de arcos ultrasemicirculares con parteluz.

ALMINAR DE SAN NICOLÁS

Existe la creencia errónea de que la mayor parte de la torre de San Nicolas, pertenece a un antiguo minarete árabe, quizás por su planta octogonal, pero lo cierto y documentado es que tan solo la base cuadrada inferior de esta bella torre corresponde a época califal. Esta iglesia como muchas de las llamadas Fernandinas, fue edificada sobre una antigua mezquita, de la que solo se conserva parte del alminar en el campanario del siglo XV.

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