Mucho antes del boom del Grand Tour romántico, hubo ilustres viajeros que visitaron la ciudad de Córdoba dejando para la Historia una muy interesante documentación sobre los lugares que visitaron. Es el caso del entonces futuro monarca florentino, Cosme III de Médici, que inicia en septiembre del año 1668, acompañado por una comitiva de alrededor de treinta personas, un viaje por varios países europeos, entre ellos España, con objeto de completar su formación y conocer de cerca las políticas y costumbres de estos países.

El grupo se embarca en Livomo el 18 de septiembre de 1668 y llega a tierras españolas el día 29, concretamente a Barcelona, desde donde se dirigirá a Zaragoza, Madrid y, de camino al sur, Córdoba, ciudad a la que llega al atardecer del día 8 de diciembre, y de la que partirá con destino a Granada el viernes, 14 de diciembre, a primera hora de la mañana.

Cosme III de Medici es recibido por todas las autoridades de la ciudad y una multitud de curiosos, pero como su visita no es oficial, él prefiere alojarse en un convento (desconocemos cuál aunque sabemos que estaba próximo al Hospital de Cardenal Salazar en la Judería). El cronista toma nota y describe todo lo que visita en la ciudad. Después de visitar la Mezquita el primer día, visita la iglesia de San Agustín de la que hace esta curiosa descripción: “ lla piu bella, moderna e ricca, clie si sia veduta in Spagna essendo tutta falta con bellissimi archi di tre navi lavorate di gesso e tutti il lavori per tutto dorati oltre le pitture frammesse e belle cappelle" (el más bello, moderno y rico, que se ha visto en España, siendo todo ello con hermosos arcos de tres naves de yeso trabajados y todas las obras para todo dorado más allá de las pinturas fragmentadas y hermosas capillas).

Pero si interesante fue la crónica del médico Giovan Battista Gornia, miembro del séquito y encargado de esta labor, lo que de verdad le ha dado “eternidad” a este viaje es la presencia de Pier Maria Baldi (Florencia, 1630-1686) arquitecto y pintor barroco florentino, acompañante de Cosme de Médici, en este viaje del que dejó un rico conjunto de dibujos con vistas panorámicas de las ciudades y aldeas por las que discurrió.

Detalle del Barrio de Santiago y algunos de sus monumentos.

Hizo más de 200 panorámicas de ciudades europeas, que hoy son una referencia esencial para conocer cómo fueron estas ciudades en el pasado. Por supuesto también levantó una precisa e interesante vista de la ciudad de Córdoba. Muy especial por el punto de vista elegido para ello, pues en vez de usar la vista más tradicional desde la orilla de la torre de la Calahorra, Baldi dibuja la ciudad desde la Fuensanta. Esto deja a la Mezquita y el Puente en segundo plano, y trae al primero todo nuestro barrio de Santiago y sus monumentos, muchos hoy desaparecidos, entre los que podemos apreciar en la panorámica, la desaparecida puerta de Baeza, la torre de las Siete Esquinas o la Iglesia de San Nicolás de la Axerquía.

Aunque hay algunas licencias creativas, el dibujo tiene gran precisión arquitectónica y de ubicación. En este enlace de la Biblioteca de Córdoba puedes ver y ampliar con gran detalle toda la panorámica.